La Ley Orgánica de Ordenación e Integración de la Formación Profesional pretende una transformación global del sistema de formación profesional y convertirlo en un sistema único que sea puerta a un empleo de calidad para los jóvenes, que sea capaz de responder con flexibilidad a los intereses, las expectativas y las aspiraciones de cualificación profesional de las personas a lo largo de su vida y a las demandas de los sectores productivos.
El objetivo es convertir a formación profesional en una palanca de transformación económica y social para el país.
El texto ha sido fruto de un intenso proceso de participación que comenzó a finales de 2020. Ha recibido las aportaciones del sector empresarial, las comunidades autónomas, otros departamentos ministeriales, interlocutores sociales, numerosas asociaciones y entidades, y también de la ciudadanía. Además, ha contado con los informes favorables del Consejo Escolar del Estado, el Consejo Económico y Social, el Consejo General de la FP, Conferencias Sectoriales y del Consejo de Estado.
La Ley se aprobó definitivamente en el Senado el 23 de marzo de 2022.
PRINCIPALES RETOS
- Adecuar los niveles de cualificación de la población activa a las necesidades de los sectores productivos
- Acreditar la experiencia laboral de las personas activas que no tienen acreditación de sus competencias profesionales (46%).
- Desarrollar un marco para la Formación Profesional Dual y ampliar la presencia de la empresa en la formación.
- Establecer un sistema de orientación profesional que acompañe a los ciudadanos en su toma de decisiones formativas.
- Aumentar el porcentaje de jóvenes que eligen Formación Profesional.
- Desarrollar un sistema de Formación Profesional a lo largo de la vida flexible, accesible, acumulable, acreditable y capitalizable.
- Incrementar el número de plazas de Formación Profesional y ajustar la oferta a las necesidades del mercado laboral.
- Aumentar el número de horas de formación que realizan los trabajadores y personas en búsqueda de empleo para equipararnos con los países más avanzados.
- Incorporar la innovación, el emprendimiento, la digitalización, y la sostenibilidad en una oferta formativa actualizada, atractiva y flexible, que dé respuesta a las necesidades de formación de la ciudadanía y de las empresas.
RAZONES QUE JUSTIFICAN LA REFORMA
España cuenta con retos estructurales que han de ser abordados, no solo desde actuaciones coyunturales, sino estableciendo un marco de ordenamiento que garantice su superación a medio plazo.
La Formación Profesional debe convertirse en una pieza indispensable para contar con un modelo productivo que intensifique los procesos de creación de valor y de empleo de calidad.
La Ley Orgánica 5/2002, de 19 de junio, de las Cualificaciones y de la Formación Profesional (Ley de las Cualificaciones), ordena un modelo que, tras el paso de 20 años, requiere una transformación en profundidad para dar respuesta a las actuales demandas de Formación Profesional de los ciudadanos.
La necesidad de repensar el futuro en gran parte de los sectores económicos para el crecimiento económico y social hace de este un momento de oportunidad para la transformación del sistema de Formación Profesional en España.
La Ley de las Cualificaciones y de la Formación Profesional establece dos subsistemas de Formación Profesional, siendo necesario crear un único sistema para abrir a la ciudadanía, de cualquier edad y en cualquier condición, oportunidades de formación acordes con sus necesidades, expectativas, y capacidades.
Es necesario corregir el déficit en cuanto a los niveles de cualificación de la población española y las necesidades y capacidad de absorción del mercado de trabajo en el horizonte de 2025 en adelante.
ELEMENTOS PRINCIPALES DE LA NUEVA LEY ORGÁNICA
ORDENA, INTEGRA Y DESCRIBE EL SISTEMA DE FORMACIÓN PROFESIONAL
Define y regula las ofertas de formación
Generaliza el carácter dual de la Formación Profesional
Regula las modalidades de impartición
Incentiva y potencia el procedimiento de acreditación de competencias adquiridas por experiencia laboral o vías no formales
Crea y regula el sistema de orientación profesional vinculado al sistema de Formación Profesional
Estrecha las relaciones entre Formación Profesional y Universidad
Incorpora la innovación, la investigación aplicada, la digitalización, la sostenibilidad y el emprendimiento a todas las formaciones
Integra la internacionalización en la Formación Profesional
Consolida la corresponsabilidad de centros y empresa en la formación
Define sus sistemas de gobernanza y evaluación de la calidad